Han pasado los días, las semanas, los meses, es más… incluso los años, pero sigue siendo lo mismo, las palabras, las risas, los extremos, lo brillos y los lugares.
Tanta agua ha pasado bajo el puente ya, que se han erosionado todas y cada una de los rocas… claro, suponiendo que cada amigo es una roca, y la erosión la madurez.
Y es que historias tenemos al por montón, minas, minos, juego, copete, drogas, diversión, payasadas y canciones son tantas sobre la memoria que se mezclan en años, algunas coetáneas otras desiguales pero llegan a lo mismo, dos personajes buscando algo, que puede no conozcan pero siguen admirando…
Personas más silvestres que comunes que buscan una luz de aprendizaje en la espesa podredumbre de la vida humana.
Dos pésimos negociantes que cambian sonrisas por morados… en el cuerpo o en alma, da lo mismo… la sonrisa es lo importante…
Y es que dos personajes tan diferentes y tan parecidos intercambian, experiencias, llantos, risas, rabias, penas, e incluso anécdotas… porqué ha pasado tanta agua bajo el puente…
Somos los mismos, más gordos, más atractivos, más regodeones, más resignados, más buenos, más malos, más lentos pero más rápidos… más viejos… más sabios…
De etapas muchas, de modas más, de rabias… de esas varias…de amigos… los buenos…
Somos dos… y en el fondo uno… pero somos de esos en las buenas y en las malas, de esos para toda la vida… de esos, no son muchos….
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